Libre al fin
Britney Spears se jacta de romper la prohibición de papá de tomar café y visitar spas
La terrible realidad que ha quedado al descubierto respecto de la vida de Britney está dando un giro, poco a poco, luego de que recuperara su vida al ganar su tutela a Jamie Spears, su padre quien manejó durante años la vida y la fortuna de su hijaBritney Spears ha compartido las alegrías de tomar café y visitar spas después de ser liberada de su tutela.
La cantante pasó más de una década bajo la orden de protección que controlaba casi todos los aspectos de su vida y estaba dirigida por su padre, Jamie Spears, antes de que se disolviera el año pasado; ahora ella le envió un mensaje de "f *** you" presumiendo de hacer todas las cosas que había prohibido previamente.
En una publicación en Instagram, Britney escribió: "¡Ha pasado un tiempo desde que hablé con mi papá! ¡Brit Brit tiene buenas noticias especiales... este año pude obtener efectivo por primera vez con mi tarjeta de cajero automático! ¡¡Maldita sea, debo decir... ¡¡¡no ser parte de su programa de tratamiento de esclavos ha cambiado mi vida!!! ¿Adivina qué? Ahora también puedo ir a spas".
Britney luego reveló que ahora también puede disfrutar de sus bebidas calientes favoritas. Agregó: "Pero MÁS BUENAS NOTICIAS... ¡Sé que no podía ir a los spas porque tenías miedo de que tomara café! ¡Ahora soy una persona igual! Puedo tomar café... y estoy muy FELIZ". !!! De todos modos, solo quería darte un hermoso FELIZ ESPECIAL que te jodan".
Britney acusó previamente a su padre de maltratar mientras él estaba a cargo de la tutela en un testimonio explosivo en un tribunal de Los Ángeles el año pasado mientras luchaba por ser liberada de la orden de protección que había estado vigente desde 2008.
El cantante dijo en ese momento: "En California, lo único similar a esto se llama tráfico sexual, hacer que cualquier persona trabaje en contra de su voluntad, quitándole todas sus posesiones: tarjeta de crédito, efectivo, teléfono, pasaporte".
Afirmó que la tutela restringió sus visitas, controló sus llamadas telefónicas y sus movimientos e incluso la obligó a implantarse un DIU anticonceptivo para evitar que tuviera otro bebé.
La tutela se disolvió en noviembre de 2021.